El Gobierno de Bolivia anula el decreto que permitía a los militares reprimir las protestas
- NOTICIAS EL GLOBO
- 30 nov 2019
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Las negociaciones con los manifestantes logran la suspensión de la orden, bajo la cual se cometieron al menos dos hechos graves de represión que dejaron 19 muertos
La presidenta de Bolivia, Jeanine Áñez, ha anulado este jueves el decreto que eximía a los militares de responsabilidad penal en la represión de las protestas que han sacudido el país en las últimas semanas. Las Fuerzas Armadas habían pedido una norma que respaldara su intervención en las manifestaciones tras las elecciones del 20 de octubre. Pero 14 días después de su aprobación, las acuerdos alcanzados en las negociaciones que el Ejecutivo mantiene con los manifestantes han provocado su derogación. Los opositores, que se han echado durante varias semanas a las calles de las ciudades bolivianas, comenzaron pidiendo la renuncia de la presidenta y terminaron aceptando desmovilizarse a cambio de la suspensión del decreto. Además solicitan compensaciones económicas por los 35 muertos y los cientos de heridos causados por la represión militar y los enfrentamientos entre los dos bandos en los que el país se dividió tras la salida de Evo Morales del poder.
Protegidos bajo el decreto que acaba de derogarse, las fuerzas de seguridad han reprimido duramente a los manifestantes. El 15 de noviembre, un grupo de cocaleros que intentaba trasladarse de Sacaba a Cochabamba, a unos pocos kilómetros de distancia, fue detenido por miembros de la policía y el Ejército. Murieron nueve campesinos y decenas resultaron heridos de bala. El 19 de noviembre, 10 manifestantes murieron baleados tras derribar el muro de la planta de combustible Senkata situada en El Alto que anteriormente habían bloqueado tras enfrentarse a las fuerzas de seguridad.
Tras lo ocurrido, Áñez agradeció a las Fuerzas Armadas haber impedido un atentado contra la planta. “El Alto ha vivido días de terror cuando se puso en riesgo la vida de más de 250.000 alteños. La tragedia habría alcanzado dimensiones devastadoras”, dijo la presidenta. Previamente, el ministro de Defensa había asegurado que los soldados no habían disparado “ni una sola bala” contra la población.
Los manifestantes de Senkata, entrevistados por este diario, niegan haber usado dinamita en la protesta, como asegura el Gobierno. “Nos quieren animalizar, dicen que queríamos volar la planta, como si no supiéramos que eso nos mataba a todos”, aseguró una de las participantes en la manifestación.

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